Tirada en el suelo de este pequeño cuarto sin luz, deberia sentir claustrofobia, pero me siento bien, sin preocupaciones, ni agobio, solo se logra apreciar una luz tenue debajo de la puerta que me hace pensar en el tiempo que hace que no encuentro la completa oscuridad, todo son luces, luces azules blancas, grandes, pequeñas, pero al fin y al cabo luces, no recuerdo aquella época en que vivia completamente a oscuras en el vientre de mi madre, supongo que intento volver ese alivio de no saber que ocurre a tu alrededor, de sentirte protegido ahi dentro de toda clase de males, pero por más que busco no logro encontrarlo, todo son presiones, problemas que se apoderan de tu ser, te hacen cada vez más fuerte o mas vulnerable, hasta que llega un punto en el que te preguntas: ¿De que vale vivir si al final moriras, al igual que naciste?
Tal vez sea una oportunidad para encontrar lo que realmente te hace feliz.
miércoles, 9 de septiembre de 2009
domingo, 6 de septiembre de 2009
Maltratando nuestra vivienda
miércoles, 2 de septiembre de 2009
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